domingo, 28 de junio de 2020

EN LÍNEA DEPORTIVA, LA COLUMNA DE PEPE HANAN

Entre la esperanza y la nueva modalidad. 
Como siempre sucede cada inicio de torneo, los aficionados renuevan sus votos con el ánimo de que venga un mejor torneo.
Así ha sido y así seguirá siendo.
En el Puebla de la franja se intenta lograr un acercamiento con sus aficionados organizando dinámicas para asistir al interior del estado y tratar de convencer a los pocos aficionados que les quedan de que se integren nuevamente a las filas del equipo, como no sucede desde hace ya muchos años.
La intención es buena sin duda y los que están atrás de ella intentan justificar los centavos que les pagan; sin embargo, al ser un tema de redes sociales, la penetración con la gente de bajos recursos resulta realmente muy pobre.
Ideas van e ideas vienen y ante el desconocimiento total de una ciudad como Puebla, terminan siempre por dar bandazos.
Preocupados únicamente por lo comercial, han olvidado lo realmente importante, el equipo de fútbol, ese equipo que mediante amor a la camiseta, buenas actuaciones y mejores resultados, obligaría al poblano a volver a asistir al Cuauhtémoc.
Debo reconocer que con la llegada de Rodrigo Incera se ve más congruencia en las decisiones deportivas, una vez que con Ángel ‘Rambocho’ Sosa todo se manejaba a base de amiguísimos y complicidades.
Todo en el Puebla era inexistente y solo pura faramalla, como se dice coloquialmente.
Al menos hoy veo la intención de mejorar la estructura de jugadores al interior del equipo, los que no jugaban y nada más cobraban se han ido en la mayoría de los casos, los que se quedaron, bajo las condiciones que sean, al menos tuvieron participación el torneo anterior y así han ido incorporando jugadores de los que se espera puedan aportar su granito de arena para que ahora sí, con la posibilidad de calificar 12 de 18 equipos, al menos esta escuadra se pueda meter y dejar de seguir poniendo en RIDÍCULO a la noble y escasa afición poblana, así como a la cuarta ciudad más importante del país como es Puebla.
Las incorporaciones de los laterales derechos George Corral y la firma de continuidad de Jesús Paganoni, le darán solvencia a un lado derecho en el que se padeció en demasía en torneos pasados.
La posible llegada del centro delantero Brian Montenegro podría ser un gran aporte en el eje del ataque poblano, el jugador tiene experiencia en Sudamérica y Europa, me dicen quienes lo conocen que en Paraguay la rompió, específicamente en Nacional, pero que afuera de su país no le ha ido tan bien.
Me platican que tiene grandísimas cualidades pero que es, hasta cierto punto, ‘pecho frío’, lo cual le ha impedido tener un desarrollo constante en los equipos en los que ha jugado.
Ojalá que en caso de que se concrete, se adapte de buena manera al fútbol mexicano y pueda rendir lo que de él se espera.

Lobos BUAP.
Los que ya tienen en su poder la carta de afiliación a la liga del balompié son los licántropos, quienes, por medio de Guillermo Aguilar, son miembros fundadores de esta liga, la cual ya tiene a doce equipos inscritos a la fecha de manera oficial.
Se espera que el próximo Jueves o Viernes, la directiva se encuentre en Puebla para realizar una conferencia de prensa en donde, además, estarán presentando a los medios de comunicación y aficionados al DT Rodrigo ‘Pony’ Ruiz.
Se vienen además buenas promociones para los niños aficionados a Lobos, los cuales, mediante dinámicas, estarán participando para salir con el equipo a la cancha durante la inauguración del torneo y en lo sucesivo para cuando el equipo juegue en CU como local.
Las intenciones de Guillermo Aguilar son las de tener un equipo competitivo que dé de qué hablar y represente de manera digna a la máxima casa de estudios del estado de Puebla.
Ojalá así sea.
Nosotros como siempre seguiremos en línea.
Hasta la próxima.
Twitter@pepehanan

ALDO TERRAZAS, TALENTOSO DEFENSIVO DE LOS TIGRES BLANCOS UMAD


Una de las características del equipo varonil de basquetbol de la Universidad Madero es la sólida defensa con la que los Tigres Blancos mantienen distantes de su aro a las quintetas rivales.
Este sello del equipo fue impreso por el coach Juan Manuel Solano, quien desde su llegada al banquillo enfatizó que esta línea sería indispensable para catapultar a los felinos a los mejores puestos de la clasificación de la Liga ABE.
Durante la campaña 2019-2020, por parte de UMAD destacó en la zona defensiva el alero Aldo Terrazas, quien tras superar un primer año donde tuvo escasos minutos, para su segunda campaña fortaleció el rol que desempeña en el equipo, mismo que esencialmente consiste en ejercer presión sobre los principales jugadores de los equipos rivales, a quienes suele quitarles balones, ganarles rebotes o bien, neutralizar.
De su crecimiento como jugador y del rol que desempeña con el equipo felino, esto manifestó Aldo Terrazas: “Me gusta tener la responsabilidad de pedir el balón y atacar, pero considero que mi principal rol en el equipo es defender.
Puedo no anotar muchos puntos en un partido, sin embargo, mi labor es más defensiva y precisamente consiste en frenar a los jugadores ofensivos de los equipos rivales, lo cual considero que es muy importante porque el proteger tu aro y evitar que anoten es igual de valioso que encestarporque a final de cuentas son puntos menos en contra que pueden ayudarnos a ganar los partidos.
En estos momentos me considero un jugador aguerrido y que va a todas ya sea en la ofensa o la defensa, pero antes, cuando jugué mi primer año, como supongo que les pasa a todos los novatos, tenía cierta pasividad para tomar decisiones y eso era algo que no me gustaba de mi juego.
El coach Juan (Manuel Solano) me dio la confianza y me solicitó que me esforzara, lo cual llevé a cabo poniéndole más intensidad a cada actividad que realizaba”.
Finalmente, Aldo Terrazas, alero de 1.85 metros, reconoció que durante el par de temporadas que lleva jugando para Tigres Blancos UMAD ha tenido grandes satisfacciones, entre ellas jugar los Ocho Grandes y también ser motivo de orgullo para su familia, misma que a pesar de la distancia,sigue sus juegos a través de las transmisiones que se realizan desde el Gimnasio Enrique Taylor.
“Mi familia es parte de todo este proceso que me ha llevado a estudiar y jugar para UMAD. Ellos me apoyaron para venir y aunque están lejos, en el norte del país, siempre siguen los juegos que se transmiten y si bien no los tengo cerca físicamente, siempre hablo con mi familia al terminar un partido porque son parte importante de mi crecimiento como estudiante y deportista”.