Por: Kevin Ricardo Hernández Chevalier
Con una histórica voltereta en la serie, los Cavaliers de Cleveland se coronaron campeones ante los Warriors de Golden State en casa del equipo comandado por Stephen Curry, por marcador de 93 contra 89, siendo la primera vez que un equipo le da la vuelta a la serie teniendo en contra un 3-1.
El marcador se mantenía en empate 89-89 a escasos segundos del término del encuentro, pero un disparo de Kyrie Irving convirtiéndose en una canasta de 3 puntos sería el que les daría el triunfo.
A pesar de que en el cuarto partido, la serie estaba a favor de Warriors (3-1), los Cavs no se dieron por vencidos y mucho menos bajaron los brazos, y gracias al liderazgo de LeBron James y Kyrie Irving, lograron su objetivo, y después de muchos años sin ganar un título, la ciudad de Cleveland salió victoriosa.
Los lideres de juego indudablemente fueron LeBron James por parte de los actuales campeones, con 27 puntos y 11 asistencias, y de parte de Golden State se lo llevó Draymond Green, obteniendo 32 puntos y 9 asistencias.
Después de un reñido juego y de una dura temporada, Cleveland al fin recibió su premio, ganándole a el mejor equipo de la temporada según las estadísticas, y sobre todo, dejando en ridículo a Stephen Curry desde 2 partidos atrás, puesto que no lo dejaron hacer lo que en toda la temporada demostró, ser el mejor jugador de la temporada.