Por
Ricardo Hernández Esparza
Roberto Ruiz Esparza, Carlos Poblete, Cristian Campestrini y
Matías Alustiza atestiguaron, entre otros integrantes del Puebla de la franja
de ayer y hoy, como invitados de honor, la aprobación por votación unánime de
37 votos a favor y ninguno en contra la Ley contra la violencia en los
espectáculos deportivos y artísticos.
Esta ley busca incrementar las penas a quienes cometan cualquier delito en estadios, imponiendo a los transgresores, sanciones de seis meses hasta 4 años de prisión y castigos onerosos desde 5 hasta 90 días de salario mínimo dependiendo la gravedad de la falta.
Esta ley busca incrementar las penas a quienes cometan cualquier delito en estadios, imponiendo a los transgresores, sanciones de seis meses hasta 4 años de prisión y castigos onerosos desde 5 hasta 90 días de salario mínimo dependiendo la gravedad de la falta.
Acudieron
al congreso como invitados especiales y testigos de honor Roberto Ruiz Esparza
y Carlos Poblete, del Instituto Poblano del Deporte y la Juventud, así como los
jugadores del Puebla, Matías Alustiza, Cristian Campestrini, Patricio Araujo,
Franco Arizala, Christian Bermúdez y Eduardo Pérez, de los cuales sólo
permitieron hablar a los medios a Ruiz Esparza y a Pato Araujo.
El
capitán Roberto Ruiz Esparza habló de la ley aprobada: “Es un acto muy
positivo, ayer tuvimos la oportunidad de estar aquí pues se discutió en comisiones
unidas. Los espectáculos deben ser amigables y es que a nivel mundial la
violencia es un grave problema que nos está rebasando, lo vimos en Eurocopa y
Copa América, es un buen momento para prevenir y mantener este tipo de espectáculos
como familiares”.
Por
su parte, Patricio Araujo, defensa central del Puebla, apuntó: “En el deporte
tenemos que predicar con el ejemplo y esto es parte del fair play. Es bueno
aprobar este tipo de leyes porque el deporte debe seguir siendo familiar y también
nos compromete a portarnos bien en la cancha porque muchas veces la violencia
también va de la cancha a las tribunas”.
Para
el jugador, es vital darle a las familias la seguridad de que no tendrá
problemas al ir a un espectáculo deportivo: “Es muy bonito ver a los niños en
los estadios, a las familias completas, es muy bonito ver la pasión de la gente
pero que no vayan más allá, que siempre haya un respeto entre espectadores”.
