Equipos gitanos.
Ni duda cabe que para los equipos poblanos cuando el panorama es más sombrío, sacan fuerzas de flaqueza y obtienen resultados positivos.
Así sucedió con la franja que aprovechó que el León venía con un desgaste importante de su encuentro de copa frente a Cruz Azul y le propinó una derrota de cuatro por cero que mantiene vivas sus posibilidades de clasificación a pesar de lo accidentado que ha sido el torneo en cuanto a lesiones.
Los 18 puntos en el casillero a falta de nueve puntos lo tienen aún con chance de meterse a la liguilla aunque por cómo se comporta el torneo, al parecer se requerirán de 26 puntos lo cual se ve francamente complicado pero mientras existan posibilidades, la esperanza está latente.
Sin duda que el regreso de Chumacero le volvió a dar a la franja solidez y salida en medio campo, situación que se había perdido durante su ausencia.
Tabó está pasando por buen momento y se está convirtiendo en un buen acompañante de Lucas Cavallini.
En cuanto a Enrique Meza y a pesar de las múltiples críticas que se le realizan por no calificar a la escuadra, a mi parecer creo que no todo ha sido malo. Me explico. Los torneos bajo su tutela han sumado más de 20 puntos, lo cual no sucedía desde antes de su llegada salvo algunas excepciones, ha logrado alejar al Puebla de la zona de riesgo en el descenso, lo cual era una problemática que se venía arrastrando desde hace bastantes torneos, además bajo su mando el equipo dejó de ser un cheque al portador.
Sin embargo, y es cierto, la gran deuda pendiente queda en el hecho de no lograr meter al equipo en zona de clasificación, lo cual desde el punto de vista de algunos pondría en veremos su continuidad al frente del equipo camotero.
Desde mi punto de vista creo que los grandes proyectos van de la mano de la continuidad y si Puebla con un buen respaldo económico quiere regresar a los primeros planos del futbol mexicano o al menos volver a ser un equipo competitivo, debe mantener la estructura y reforzarla torneo a torneo bajo el brazo de un viejo lobo de mar como lo es Enrique Meza, al menos es mi opinión.
Ni duda cabe que para los equipos poblanos cuando el panorama es más sombrío, sacan fuerzas de flaqueza y obtienen resultados positivos.
Así sucedió con la franja que aprovechó que el León venía con un desgaste importante de su encuentro de copa frente a Cruz Azul y le propinó una derrota de cuatro por cero que mantiene vivas sus posibilidades de clasificación a pesar de lo accidentado que ha sido el torneo en cuanto a lesiones.
Los 18 puntos en el casillero a falta de nueve puntos lo tienen aún con chance de meterse a la liguilla aunque por cómo se comporta el torneo, al parecer se requerirán de 26 puntos lo cual se ve francamente complicado pero mientras existan posibilidades, la esperanza está latente.
Sin duda que el regreso de Chumacero le volvió a dar a la franja solidez y salida en medio campo, situación que se había perdido durante su ausencia.
Tabó está pasando por buen momento y se está convirtiendo en un buen acompañante de Lucas Cavallini.
En cuanto a Enrique Meza y a pesar de las múltiples críticas que se le realizan por no calificar a la escuadra, a mi parecer creo que no todo ha sido malo. Me explico. Los torneos bajo su tutela han sumado más de 20 puntos, lo cual no sucedía desde antes de su llegada salvo algunas excepciones, ha logrado alejar al Puebla de la zona de riesgo en el descenso, lo cual era una problemática que se venía arrastrando desde hace bastantes torneos, además bajo su mando el equipo dejó de ser un cheque al portador.
Sin embargo, y es cierto, la gran deuda pendiente queda en el hecho de no lograr meter al equipo en zona de clasificación, lo cual desde el punto de vista de algunos pondría en veremos su continuidad al frente del equipo camotero.
Desde mi punto de vista creo que los grandes proyectos van de la mano de la continuidad y si Puebla con un buen respaldo económico quiere regresar a los primeros planos del futbol mexicano o al menos volver a ser un equipo competitivo, debe mantener la estructura y reforzarla torneo a torneo bajo el brazo de un viejo lobo de mar como lo es Enrique Meza, al menos es mi opinión.
La BUAP en ascenso.
Pian pianito y de a poco, el funcionamiento de los universitarios va en ascenso y ligaron su quinto partido sin conocer la derrota.
La visita a Tigres se daba como derrota segura, pues los de Ferreti cuentan con un cuadro poderoso que rara vez pierde puntos en su terruño; sin embargo, un buen primer tiempo culminó con la anotación (vía penal) por parte del goleador argentino Leonardo Ramos, para la segunda mitad dos anotaciones del ex lobo Julián Quiñones parecía que dejarían a los de Palencia con las manos vacías pero ya para terminar, un gol del 'Maza' Rodríguez en un verdadero acto de contorción con la cabeza, pusieron cifras definitivas de dos por dos que le permite a los licántropos traerse un punto que no estaba presupuestado y que los mantiene por arriba de los Tiburones del Veracruz, quienes volvieron a perder y ya hasta sin DT se quedaron.
Mientras Veracruz se desfonda, los de la BUAP mejoran su futbol y suman en las últimas cinco jornadas y de mantenerse la tendencia, los Lobos estarán en vías de lograr el objetivo de mantenerse en el máximo circuito en ese torneo aparte que disputa con el equipo jarocho en pos de la permanencia.
Se viene el próximo sábado un encuentro importante frente a Xolos donde una victoria pondría a los licántropos en la ruta de la salvación.
Nosotros como siempre seguiremos en línea.
Hasta la próxima.
Twitter@pepehanan