Una liga difícil de
entender.
La Liga Mx
es tan fácil, que por eso es difícil de entender.
Damos
muchas vueltas intentando descubrir cómo es posible que en México el último
lugar de la tabla sea capaz de ganarle al superlíder, por ejemplo.
La realidad
es que la diferencia de planteles entre el mejor y el peor no es tanta.
Obviamente
en los momentos definitorios, esa diferencia de calidad generalmente queda
manifestada y se impone el mejor; sin embargo, durante el desarrollo del torneo
en el que, como se ha mencionado hasta el cansancio, la mediocridad manda pues
clasifican 12 de 18 equipos y ni siquiera existe riesgo de descenso, las
escuadras se la llevan digamos ‘light’ y van sumando y esforzándose de acuerdo
a las necesidades que tienen conforme avanza el torneo.
Y es por
eso que equipos como Querétaro son capaces de derrotar a un Toluca que venía de
ganarle al campeón Pachuca en su casa y después golear al Santos en Torreón por
5 goles.
Así como
Mazatlán es capaz de ganarle a un Cruz Azul que llegaba ya con ‘Tuca’ Ferretti
en el banquillo y que incluso se había puesto arriba en el marcador, para
terminar goleándolo al son de 3-1
Y así
también como la franja del Puebla fue capaz de derrotar al tercer lugar general,
las Chivas, quienes venían ya manifestándose como candidatos serios al título y
terminaron por sucumbir al son de 1-0 frente a la escuadra de Arce, que sumó su
segunda victoria de manera sorpresiva y ha recuperado el camino que lo llevará
al menos al repechaje.
En México,
ser DT joven o debutante es sinónimo de complicaciones y posibles fracasos. Mire
usted: Eduardo Arce, Benjamín Mora, Rafa Puente, ‘Chima’ Ruiz, por mencionar
algunos y los cuales tienen de manera permanente la guillotina pendiendo sobre
su cabeza y a expensas de perder dos partidos para ser despedidos.
Con
respecto a la franja del Puebla, muchos no quedaron satisfechos con la
actuación del equipo a pesar de la victoria por la mínima diferencia sobre las
Chivas del Guadalajara.
Primero
debemos, desde mi óptica, tener claro que el equipo juega de acuerdo a sus
condiciones y circunstancias, que no es espectacular, ya lo sabemos, no tiene cómo.
Que se tiró
atrás la mayoría del partido también es cierto, pero a decir verdad no tenía
muchas más opciones.
Que la posesión
del balón la tuvo Guadalajara también es cierto, pues así le convenía a los
jugadores de Arce.
Que al
final los tres puntos se quedaron en casa, también es muy cierto y al final es
lo que cuenta.
Así es que
apoyemos a los jugadores y cuerpo técnico para que basados en sus posibilidades,
puedan obtener resultados positivos.
No exijamos
lo que no tenemos y tampoco nos volvamos locos por las derrotas que pudieran
venir o llegar.
Es lo que
se tiene y con eso se tendrá que luchar para intentar llegar al repechaje.
Se viene
otro partido como local ahora frente al alicaído Atlas, también de Guadalajara,
que, de acuerdo a lo visto a la fecha, sería víctima segura, sobre todo porque
además de venir arrastrando la cobija, tendrá un exceso de partidos incluidos a
media semana con encuentro de la Concachampions en el que en los octavos de ida,
fue goleado en Centroamérica.
Sin embargo,
como es el fútbol mexicano y después de todo lo platicado y analizado,
cualquier cosa podría pasar, así es que a jugar el partido con la mayor
seriedad, con el objetivo de sumar tres unidades más que enfilen al equipo al
repechaje, el cual, a mi parecer, estaría a 10 puntos más de lograrse.
No
entienden, ni entenderán.
A
diferencia de los jugadores y cuerpo técnico del Puebla que salen al terreno de
juego a dejar todo durante los 90 minutos, a nivel empleados pseudo directivos
del Puebla, los abusos y raterías continúan.
En esta
ocasión los palcos itinerantes asignados al DIF estatal, fueron vendidos -cada
boleto- en la módica cantidad de 1,500 pesos.
Seis palcos
de 10 lugares cada uno, a mil quinientos el boleto, dan 90 mil pesitos para el
bolsillo de Ro(b)a y los 40 ladrones.
Dinero que
no se reporta a las arcas del club y que vaya usted a saber el destino final
del mismo.
Anexo
boleto como evidencia nuevamente.
Y ya de lo
sucedido en el estacionamiento ni le platico, pues desde los 50 pesos y hasta
los 300 cobraron por no maltratar tu automóvil afuera del Estadio Cuauhtémoc.
Es cuánto.
Nosotros
como siempre seguiremos en línea.
Hasta la
próxima.
Twitter@pepehanan