domingo, 21 de mayo de 2017

EN LÍNEA DEPORTIVA, LA COLUMNA DE PEPE HANAN.

La regadera del campeón.
Así, con una regadera de agua, refresco, cerveza y quién sabe qué más, terminó el camino de los Lobos BUAP en su paso por la división de ascenso.
Después de muchos años, la afición universitaria por fin podrá ver a su equipo en el máximo circuito.
Unos Lobos de la BUAP que se metieron en el cariño de la gente poblana a base de jugar un futbol agradable y ofensivo, donde siempre predominó la solidaridad y el respeto por el compañero, valores implementados por Rafa Puente Del Río y su cuerpo técnico que supieron llevar este proyecto como un cuento de hadas a un final feliz que por lo pronto representa un gran reto en lo que está por venir.
En lo personal, puedo confiarles que este ascenso y su camino han sido una de las mejores experiencias de mi vida; pude, desde un inicio, vivir y saber a fondo la problemática de este equipo desde mi calidad de vocal del patronato encabezado en primera instancia por el Rector de la máxima casa de estudios, Alfonso Esparza Ortiz, a quien felicito por las ganas y el pundonor que le puso para lograr en la universidad pública de Puebla, lo que nadie había hecho desde la fundación del club, acompañado por Rafael Cañedo como presidente y por Eduardo 'Lobo' Henaine como secretario general y comandando el proyecto deportivo una joven talentosa, estudiosa del futbol y sus manejos como Luza Andrea Esparza Vergara quien supo decidir desde su posición de estratega deportiva, la llegada de lo que resultó ser la mejor decisión de su vida, darle la oportunidad que tanto había buscado Rafa Puente y su cuerpo técnico, pues resultó tan trascendental, que el equipo terminó por ponerse de golpe y porrazo en el máximo circuito.
Pasando por un camino tortuoso, complicado y lleno de obstáculos, este equipo logró pasar por encima de todo y de todos para lograr lo que hoy es una realidad.
Esta experiencia me deja un grato sabor de boca al darme cuenta que el haber dado a conocer la red con la que el arbitraje se maneja en nuestro país, fui víctima de ataques y censuras por parte de la misma FMF al impedirme ingresar al campo de juego previo y después de los partidos, a lo cual tenía derecho por mi posición de vocal del patronato, me coartaron mis derechos y garantías individuales de las que gozamos todos los mexicanos sólo por atreverme a denunciar vía redes sociales, las arbitrariedades y vejaciones de las que Lobos BUAP era víctima, pero ahora me doy cuenta que cada teclazo que di para denunciar ante los mexicanos esta situación, valió la pena, gota a gota, porque de alguna manera influyó (sólo un poco) para tratar que el arbitraje fuera más justo, lo cual me tiene sumamente orgulloso pues este oficio (periodista) del cual me acusan en la FMF al no saber que me dedico a todo en Puebla menos al periodismo (mis respetos para quienes sí lo son) ayudó con un granito de arena a lograr que en la medida de lo posible se impusiera la justicia y ascendiera quien había hecho los méritos para lograrlo y esos no fueron otros que los Lobos de la BUAP.
Lo que se viene para los licántropos será tema en una próxima entrega.

Puebla, emproblemado.
Pues al momento la posibilidad de que Puebla permanezca en la Angelópolis, sigue latente, hasta donde sé, el posible comprador reculó y ya no quiso entrarle, existía otra opción que se estaba analizando pero nada estaba definido, por lo que al parecer los López Chargoy podrían seguir conduciendo los hilos del equipo Puebla al incluir a algunos posibles socios que pudieran complementarse con ellos para tratar de armar un cuadro competitivo realizando una mezcla de Jaguares de Chiapas y el mismo Puebla en un intento por salvar la categoría el próximo torneo en lo que algún empresario se acerque con el interés propio de comprar y lo más importante, dejar a la franquicia en la ciudad de Puebla.
Si el diablo no mete la cola, en resumen, los Chargoy podrían quedarse dentro del equipo acompañados de otros socios, estos aportarían jugadores tanto del Puebla como de Jaguares sin costo para los socios y estos trabajarían en conseguir los patrocinios suficientes y encargarse del manejo tanto administrativo (sueldos) como deportivo, a la espera de que en un corto plazo llegue un comprador importante que ya sea se integre a la sociedad o en su defecto compre el total de las acciones pero con el compromiso firmado de que la franquicia se queda en Puebla.
Ante las declaraciones de Decio de María en el sentido de que para el próximo torneo Puebla no tendrá cambio de sede, crece la posibilidad de que tengamos muy pronto el clásico poblano entre el Club Puebla y los Lobos de la BUAP.
La Angelópolis contará con futbol de primera división semana a semana.
Nosotros como siempre seguiremos en Línea.
Hasta la próxima.
Twitter@pepehanan