Inestabilidad emocional
en el Puebla.
Es increíble lo que está sucediendo al interior del Club
Puebla con respecto a los jugadores y el cuerpo técnico, avalado por los
empleados del club.
Destruir a Eduardo Saracho y al legado de Nicolás Larcamón
son los objetivos de los actuales directivos empleados y del cuerpo técnico.
Deshacerse de jugadores mayores y según ellos problemáticos,
son las prioridades de quienes quieren escalar posiciones en el Club Puebla
para beneficiarse económicamente.
Soy consciente de la molestia que generará esta columna, pero
como no tengo compromiso con nadie, me dispongo a platicar el pésimo ambiente
que se vive al interior del vestidor del equipo de la franja.
No es nuevo el asunto, desde el torneo anterior usted se dio
cuenta de la baja de juego que sufrió Antony Silva, no es casualidad, el
ambiente al interior no es el mejor.
Eduardo Arce maneja una política interna de estás conmigo o
contra mí, esta situación ha generado división al interior de la plantilla pues
ya existen jugadores que no se quieren acercar a algunos de los veteranos por
temor a ser borrados por Arce y no volver a ser considerados.
Algunos jugadores veteranos, entre ellos Antony, cuestionaron
durante el torneo anterior algunas decisiones tácticas de Arce con quien
discutieron abiertamente dentro del vestuario.
Son incómodos, dice el cuerpo técnico al grueso del plantel.
Es por eso que gente como Lucas Maia, George Corral y Omar
Fernández están fuera del equipo y también es por eso que a gente como
Mancuello, Antony, Ferrareis y Gularte les buscan equipo de manera desesperada.
Buscando intercambios y con muchas ganas de deshacerse de
ellos, incluso a la mayoría de ellos ya se les informó que no entran en planes
del actual cuerpo técnico, sin embargo, algunos aún tienen contrato vigente por
lo que de no ser canjeados o vendidos, tendrán que permanecer dentro del club o
en su defecto se les tendrá que pagar su sueldo íntegro.
Tanta avaricia va a llevar a Arce a caer víctima de su propia
soberbia, mire que un debutante que no acepta el menor consejo o comentario de
gente con experiencia está destinado al fracaso y después de lo que me
platicaron, no me queda la menor duda.
Muchos jugadores por temor no dicen nada, quienes sí lo han
hecho están cepillados e incluso las amistades de las esposas y madames que cohabitan
en el club han sido retiradas de las familias de los jugadores antes
mencionados.
Solo falta checar las redes sociales como el Instagram para
darnos cuenta que las publicaciones que antes pululaban con las esposas e hijos
de los ‘apestados’ han dejado de ser posteadas.
Muchos jugadores extrañan las formas de Larcamón que según me
dicen era como un papá que corregía pero con talento y tacto y no a un ‘Tirano’
como califican a Arce de quien aseguran no tardará mucho en caer y sobre todo
por el mal trato y el ambiente de terror que maneja al interior del vestidor.
En complicidad con el cero a la izquierda de Carlos Poblete
quien además estuvo involucrado en la reventa de los boletos de la final que
les obsequió la directiva de Chivas y que terminaron vendiendo en 22 mil pesos
cada uno (eran 10 boletos) intentan acabar con Eduardo Saracho que es el único
que mete orden en las contrataciones y a quien desean desplazar para hacer el
negocio de los jugadores, ellos.
Es decir, Saracho es un dique que no les permite hacer
negocios con las transferencias de los jugadores y es por eso que el objetivo
es eliminar cualquier vestigio dejado por Larcamón y al lograr esto, debilitar
a Saracho para que sea despedido, ellos puedan servirse con la cuchara grande.
El triángulo Arce, Poblete y Ro(b)a vs Saracho y lo dejado
por Larcamón.
Al final todo se traduce en un tema de pesos y centavos.
Ojalá no sean los pobres aficionados poblanos los que
terminen pagando los platos rotos de esta disputa interna que es más que real y
la cual seguramente tratarán de desmentir de mil maneras.
Pero afortunadamente después de tantos años y después de
decir a través de sus ‘bots’ pestes de mi persona, lo único que no han logrado ha
sido desmentirme.
El Comodato.
Quienes no quitan el dedo del renglón son los mismos
empleados de siempre.
Mire usted:
Mantienen sus pretensiones de arrancarle al Gobierno del
estado un comodato por 30 años, en el cual ellos puedan manejar a su antojo el
estadio que es de los poblanos, para poderlo rentar y comercializar para
distintos eventos, bodas, 15 años, primeras comuniones, conciertos, torneos de
distintos ámbitos, etc., etc., etc.
No solo eso, pretenden obtener del Gobierno un permiso
especial para demoler el área de personas discapacitadas y construir ahí un Bar
que pueda ser subarrendado a alguna cervecería para que durante y después de
los partidos, los amigos de la directiva puedan tomar alcohol hasta altas horas
de la madrugada.
Es decir, los discapacitados es lo de menos, lo
verdaderamente importante es el negocio de la venta del alcohol.
A cambio de todo esto, Ro(b)a y los 40 ladrones ofrecen ahora
sí de a deveras, reforzar al equipo con jugadores de calidad como la ‘Foca’ Velasco
y el veteranazo de Brayan Ángulo (risas grabadas).
Pretenden engañar al Gobernador SERGIO Salomón con este tipo
de falsas promesas.
Lo que Ro(b)a y el ‘Chompiras’ Jiménez no se dan cuenta que
si fueran tan abusados y audaces, alguno de ellos sería el gobernador y el
gobernador sería empleado del club como ellos.
Pobrecitos.
Por lo pronto, en la secretaría de administración el asunto
está detenido hasta que quien manda en este estado que no es otro que el
Gobernador Sergio Salomón Céspedes diga lo contrario.
Está usted bien informado.
Nosotros como siempre seguiremos en línea.
Hasta la próxima.
Twitter@pepehanan