Ridículo.
Ese es precisamente el calificativo que encuentro para las sanciones impuestas
tanto a Ricardo Ferretti, porra de Tigres y al estadio y Directiva del Veracruz
después de los desmanes que nos regalaron en el pasado encuentro en el Puerto
Jarocho.
Lo
que se ve en las imágenes es “dantesco”. Dos porras sin control arrasando con
todo y contra todo lo que se mueva sin mirar si son mujeres, niños o simples
aficionados que por obra del destino estaban sentados en medio de esta bola de
desadaptados.
Dos
partidos y una multa económica al Tuca por ofender a la policía y según él,
tratar de calmar a los rijosos se me hace poco.
Ferretti
tiene rato ya que ha dejado de ser un buen ejemplo para los aficionados. Es
brillante como técnico pero en sus apariciones públicas no pasa de ser un señor
agresivo, grosero y hasta prepotente.
Es
un entrenador brillante sin duda, de lo mejor que hay en México pero, ha
perdido el control de sus emociones escudándose en la defensa de sus ideas,
dice.
Yo
trabajé con Tuca en el Mundial de Korea / Japón 2002, disfruté de sus análisis
y pasamos un buen rato charlando de futbol en el viaje de regreso de Oita a
Tokio, luego del partidazo entre México e Italia.
Me
ayudó incluso para enviar de una mejor manera, mi análisis de “un día después”
que el Diario Ovaciones publicaba en sus páginas. Un Ricardo amable, atento,
sobrio, educado. Prefiero quedarme con esa impresión y no con el que ofende
periodistas, jugadores, aficionados en la calle y defiende su postura como s
fuera un gran ejemplo.
De
risa, de poca seriedad la sanción de un partido de Veto, ¡UNO!, al estadio de
los Tiburones. Una acción así, una operación pobre del manejo de porras para
los encargados del estadio merece primero más juegos y una súper multa en
dineros y además hasta pérdida de puntos.
Cuando
eso suceda, será cuando los clubes reacciones y empiecen a controlar a sus
porras. Los puntos son los que les duelen, no el dinero, no los partidos
cerrados.
¿Y
Gignac?
Obviamente
lo que André Pierre celebró no fue para su familia. O tal vez sí. Pero el sabía
que estaba en un estadio rival, caliente y que con los litros de alcohol que
llevan ya en sus venas, iban a reaccionar de esa manera.
Claro
que fue una provocación la forma de festejar. Claro que los iba a calentar,
claro que los iba a provocar. Valdría bien un jalón de orejas en la
disciplinaria para el crack. Su festejo claro que motivó parte de la reacción.
¿Hasta
dónde?
¿Hasta
cuándo seguiremos viendo este tipo de acciones en nuestros estadios?, ¿de qué sirven
las campañas sociales de buen comportamiento y transmisión de valores?, ¿de qué
sirve que expongamos a los célebres “Lords” y a las ridículas “Ladys” si a la
primera oportunidad que tenemos sacamos nuestro “naco” que llevamos dentro?.
¿Para
qué nos hacemos los santos y somos igual de demonios que todos ellos?, ¿De qué
sirven los golpes en el pecho, si a la hora del pecado nos masificamos y en nadie
cabe la prudencia?. Estamos perdiendo nuestro tiempo.
¿Y
Pereira?
Chivas
se jacta de ser una institución muy leal y que defiende los buenos principios y
costumbres. Falso. Ejemplos hay varios.
Empezando
por su Directivo Higuera que a la primera oportunidad que tiene provoca a
través de Tuiter y luego se espanta cuando le contestan. O aquella campañita
que traína sus jugadores cuando fingían faltas para tener ventaja dentro del
área o tiros libres y en las cuales su máximo exponente era Carlitos Fierro. Lo
peor fue que en su momento, el Director Deportivo Néstor de la Torre lo
defendió.
Lo
que hizo Jair Pereira a Jonathan Fabbro es desleal. Es un golpe artero y con
ventaja, con ganas de lastimar y lesionar. Fue un golpe con coraje y fuerza
desmedida.
El
hecho de que van disputando los dos la pelota no disculpa y mucho menos
justifica la deslealtad hacia un compañero de profesión por darle un golpe y
sacar así la frustración de un resultado que les sacaron de la bolsa.
Sancionado
debe ser. Y de forma ejemplar.
Puebla
y Jaguares
Vaya
partidazos que nos regalaron. El panorama luce mucho mejor, pero mucho mejor.
La porcentual parece despejarse mucho tras estos resultados. Ahora, hay que
mantener el paso y no caerse Puebla en casa contra Tigres y mucho menos Jaguares
con Cruz Azul.
Dicen
que las negociaciones por la venta del Puebla se habían detenido porque el
equipo no sumaba puntos y se metía en líos de descenso cada vez más graves.
¡Por favor Franja!... ¡NO dejen de ganar!, miren que es por su bien.
Nos
leemos en este espacio la próxima semana, mientras tanto nos vemos de lunes a
viernes en Las Noticias de la Mañana a las 5:50 am por Televisa Puebla /
Sígueme en twitter y facebook como @patoaguilar73 y opina.