La comunidad Azteca se unió
a la conmemoración del Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la
Paz, pues además de traerles beneficios al poder estudiar en la Universidad de
las Américas Puebla o en lo físico; la disciplina que cada uno realiza les ha
apoyado para el cuidado de la salud mental durante el período de encierro por
la pandemia.
Desde 2013 la Organización de Naciones Unidas (ONU)
eligió al 6 de abril para rememorar al deporte, como un promotor de los
derechos humanos, valores positivos, desarrollo económico y social. El día se
atribuye porque hace 126 años en Atenas, Grecia, sucedieron los
primeros Juegos Olímpicos. Ante ello los Aztecas UDLAP evocaron
la fecha como un punto importante, para tomarlo como un hábito para
el cuidado de la salud, sobre todo la mental.
“El deporte no solamente es la actividad física,
sino requieres de la oxigenación en el cerebro y cuando tienes algunos
problemas en casa o en el trabajo, te ayuda mucho a desestresarte y a observar
diferentes puntos para solucionarlos. También la pandemia nos mantuvo
encerrados mucho tiempo, todos tuvimos un grado de depresión y la única manera
de salir es moviéndonos, claro siendo prudentes con las normas sanitarias”,
expuso el entrenador de taekwondo Azteca, Julio Álvarez.
Una buena forma para tomarlo como un hábito
diario, alentó el coach Álvarez, es practicar algún deporte en familia,
sobre todo cuando se tienen hijos pequeños, porque así se transmiten los
beneficios y se convierte en una acción cotidiana para ellos durante su
crecimiento. Al paso del tiempo, probablemente ese menor se dé cuenta de sus
habilidades, las vaya desarrollando y pueda aspirar a una beca deportiva o
estar en un ámbito profesional. Para empezar “tienes que hacer el deporte que a
ti te guste, sea muy divertido, cada vez que lo hagas lo disfrutes, porque
nunca van a descubrir su potencial si estás sentado”, añadió.
Así la mejor manera
para celebrar este Día Internacional del Deporte para la Tribu Verde fue el
practicar por segunda semana consecutiva en las instalaciones de la UDLAP,
cuestión que ha llenado de felicidad el poder regresar a una pista o a una
cancha tras meses de prácticas en línea. “La verdad extrañaba mucho mi rutina
de entrenar presencial y todo lo que conlleva, los entrenamientos están pesados
porque hace mucho no estábamos en condiciones como atletas de alto rendimiento,
pero poco a poco esperamos regresar a lo que éramos antes”, expresó la jugadora
de voleibol, Lorena Gómez.