Por
Ricardo Hernández Esparza
Con
una oreja en su haber, el rejoneador Emiliano Garnero fue el triunfador de la
primera corrida de toros celebrada en la Plaza El Relicario “Joselito Huerta”
con motivo de la Feria de Puebla 2016. Sus alternantes, Uriel Moreno “El Zapata”,
y Antonio García “El Chihuahua”, se fueron con palmas de los asistentes que
ocuparon casi media plaza.
Los
astados de San Marcos, bien presentados, permitieron a los participantes el
lucimiento en sus respectivas oportunidades ante una afición taurina dispuesta
a disfrutar de una buena noche de toros en la que se le dijo adiós al forcado
poblano Jorge Adrián Alarcón, integrante de los forcados amadores de esta
ciudad, el cual realizó la pega al toro que abrió plaza, en el momento emotivo
de la corrida cuando dio la vuelta en hombros.
A
Emiliano Gamero le fue bien con su primero de la noche, aunque fue ante el
segundo que, después de haber probado la bravura del astado, le clavó dos
rejones de castigo complementados con buenos quiebres y terminó matando con
eficacia, convenciendo al juez de otorgarle una oreja que ciertamente fue
protestada por un sector del público.
“El
Zapata” cumplió con los toros que le tocaron, siendo bien recibido luego de
aquella cornada sufrida en este mismo escenario hace unas semanas, misma que le
pudo costar algo más que un susto, aunque para su fortuna, terminó
recuperándose totalmente y este sábado se vio bien, aunque no le alcanzó para
llevarse trofeo.
Y
“El Chihuahua”, aunque fue reconocido con aplausos en sus dos faenas, fue, a
final de cuentas, el menos espectacular de los 3 en turno.
Así
concluyó la primera de feria.