La subcampeona mundial en la
categoría –49 kilogramos, de la selección de Jordania, Dana Touran, quedó
enamorada de México, pero sobre todo, de Puebla por su belleza, cultura y
gastronomía.
A sus 25 años, Dana es una
deportista privilegiada porque regresará a su país como la segunda mejor
competidora del mundo en su división. Orgullosa con su medalla, la cual tendrá
un lugar especial en su corazón, expresó el amor que surgió hacia la ciudad.
“Fue emocionante estar en un
escenario como el Centro Expositor y de Convenciones, adonde el público nos
contagió con su alegría. A pesar de perder estoy muy contenta con un logro más
en mi carrera”.
La medalla borra cualquier dolor
físico. Y es que Dana, durante la gran final, sufrió un intenso dolor en la
rodilla izquierda, “me atendieron de inmediato, fue excelente el trabajo del
cuerpo médico”, explicó al tiempo de mostrar su vendaje y los famosos tapes.
Para Dana, es la segunda vez que
visita México. En la primera ocasión, asistió al Campeonato Mundial Juvenil en
Tijuana y ahora está en Puebla. A través del autobús que la traslada del hotel
a la ciudad, junto a la delegación jornada, pudo conocer un poco más de la
Angelópolis, “es una ciudad muy bella, me gustó admirar sus paisajes y me
sorprendió ver que tiene muchas iglesias. En sus calles está el ir y venir de
la gente”. Y admitió con una gran sonrisa, “amo a México, amo su comida, amo
los tacos”.
Jordania es una de las
delegaciones más pequeñas del Campeonato Mundial de Taekwondo Puebla 2013, con
seis hombres y tres mujeres. Por ello, Dania está doblemente orgullosa del
subcampeonato que contribuirá al crecimiento de este arte marcial en su país.