Las chicas del básquet
Patricio Aguilar
Delgado
Me da un gusto
enorme el poder compartir la emoción y el orgullo de todos y cada uno de los
papás que estuvieron en la presentación de las chicas poblanas que participaron
y ganaron el Cuarto Festival Mundial de Minibaloncesto en Argentina.
Y lo digo porque
uno de ellos es mi amigo desde la primaria y entonces, el sentimiento crece y
la emoción… de igual forma.
Silvia Hernández
Beristáin es tehuacanera e hija de Víctor Daniel Hernández Camargo, mi
compañero en el Colegio Kennedy.
Al tiempo, me
entero que otra niña, también de Tehuacán participó del equipo formado gracias
al talento y la dedicación del coach Bayón, el artífice de este triunfo
internacional.
Lo anterior me
provoca una satisfacción mucho más especial por el simple hecho de ser
paisanos, pero no demerita en nada, el gusto por el esfuerzo de todas las demás
jugadores que lograron un triunfo importante para su deporte. Es un punto
sentimental personal pues.
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Lo valioso
El simple hecho
de salir del país, solas y experimentar un viaje de tantas horas y regresar ya
es un triunfo; pero cuando se regresa con el título del Festival, el resultado
crece.
Lamentable o
afortunadamente (depende de cómo se vea), el resultado se da a la par del que
también lograron los niños oaxaqueños de la comunicad Triqui, quienes tienen la
particular costumbre (porque así lo han hecho siempre) de jugar sin zapatos y
por lo mismo, traen consigo la cobertura mediática desde hace ya un buen rato.
Es un punto especial, pues. Independientemente de lo buenos que también son.
Estas chicas
merecen toda la atención y respaldo de las autoridades. Si bien es cierto que
el torneo no es un campeonato Mundial, sí es un Festival de participación y
competencia en el que el resultado de todo el respeto.
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Las necesidades
Para una
participación tal, se necesita de mucho dinero. Son boletos de avión,
hospedajes, comidas, inscripciones, uniformes… no hay presupuesto que alcance
(y lo digo porque me consta, nadie me cuenta) y como es costumbre, no se
recibieron los apoyos que se hubiera querido.
La
responsabilidad o culpa no es del equipo, ni de los papás y aunque suene
“protector” tampoco, en cierta medida, de las autoridades deportivas rectoras
del deporte oficial.
Es
responsabilidad directa de los que “mandan” y “organizan” el básquetbol. Para
radicar un dinero público (como es el del Estado e Incluso el Municipal) es
necesario que la Asociación y/o Federación respectiva esté al ciento por ciento
constituida y avalada de entrada, por CONADE y hasta por la casi extinta
CODEME. Y ellos no lo están.
Desgastantes han
sido (y también lo digo porque me consta y nadie me lo cuenta) los intentos por
lograr primero reunir y después unir a todos los que dicen ser los dirigentes
del básquet y jalar para el mismo lado… llámese Federación, Agrupación, Ademeba
o como quieran denominarse según el momento en que les conviene.
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Los intentos
Lo que lograron
los muchachos del Tri que van al mundial de baloncesto en España –este sí reconocido
por FIBA Américas- es parece, el primer paso para poder lograr una unión… pero
la solución está muy lejos créame, de dar la vuelta por la esquina.
Este triunfo es
de las niñas y su coach, de los papás y familiares. De nadie más.
Así que chiquillas,
celébrenlo y aprendan lo que significa representar unos colores, los de su
escuela, Estado o País cuando se presente la oportunidad. Insisto comparto su
emoción y su orgullo.
Señores
directivos de las diferentes organizaciones que se “jactan” de ser los “dueños”
del básquetbol… pongan YA en orden sus Organismos para que la próxima
vez, las chicas no se vayan sin los respaldos que verdaderamente necesitan.
Nos leemos la próxima semana, mientras tanto…
nos vemos de lunes a viernes a
las 5:55 horas por Televisa Puebla en TV3
noticias Matutino y nos escuchamos a las 8.30 en Explosión Deportiva por la Ke Buena 1010 AM.